Tantas cosas que pudieron haber pasado, y de hecho lo hicieron, desde Agosto con mi última entrada en éste blog.
Sonrisas por montones, salidas en coche, lluvia con los vidrios empañados, carcajadas incontrolables, fiestas, abrazos, nueva gente, nuevas amistades.
Pero también peleas, adaptación, miedo al cambio. Amigos viejos que probablemente ya no lo serán más, amigos viejos que siguen siendo nuevos.
Mucho tiempo pasó, y por momentos, las entradas antiguas de éste blog no se veían tan lejanas.
Ahora me doy cuenta de que en realidad la distancia entre el yo de ahora y el yo de hace seis meses es impresionante.
Es en mi México en donde soy feliz, y también triste. Estas emociones se ven magnificadas aquí, y no me acuerdo de otro tiempo en el que me haya sentido así de vivo, como ahora lo estoy.
Vivo, para las cosas buenas, que afortunadamente son muchas, pero también para las cosas malas.
Mi última entrada hablaba del cambio.
Fué un cambio enorme. De costumbres, de gente, de ambiente.
ENORME, les digo. Enorme, porque por fin vi las cosas desde los ojos de los demás como por mucho tiempo las vi simplemente desde mis ojos.
Encontré gente que compartía muchisimas cosas que compáginaban con mis ideas, con mi forma de pensar. Como si ésto me hubiera estado esperando desde hace mucho tiempo.
Y fué enorme, porque con ése compartir conflictuó mi antigua manera de relacionarme con los demás.
Por unos cuantos meses, hubo conflicto por todas partes. Dentro de mi, y afuera de mi. De ésos conflictos, algunos se resolvieron, pero algunos no, y tuve que aprender a darme cuenta de que a veces las amistades terminan así.
Ya no me da miedo expresar lo que antes sólo me sentía comodo escribiendo. No me dá miedo hablar de lo que significa todo lo que hago. Eso es bueno.
Me doy cuenta de éste blog empezó como una especie de Carnets de Voyage, en donde escribía lo que ése viaje que ahora forma parte de mi pasado estaba significando para mi. Ahora documento otro tipo de experiencias, del viaje hacia mi mismo que solo va a terminar cuando me muera.
Tengo material para un buen rato, yo creo.
Esto suena un poco como si de pronto, quisiera resumir mucho tiempo en poco espacio, y la verdad es que sí, es lo que estoy tratando de hacer. Hay muchas cosas en las cuales me podría extender montones, pero la verdad es que eso ya lo viví, y no creo q valga la pena quedarse estancado en eso.
Resumo diciendo que fueron unos seis meses muy intensos, que viví al máximo, y es todo lo que podría pedir pues es la única manera en la cual quiero vivir.
A los que siguen leyendo éste blog, y que lo checan esporádicamente, los quiero muchísimo....espero que lo sepan.
No me despido diciendo que voy a escribir más seguido, mejor solamenté dejaré a mis acciones hablar por mi
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